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Viviendas en el Rastro
Tipo: Edifico Residencial
Año: 2017
Localización: Pza. del Campillo del Mundo Nuevo. Madrid
Status: Concurso. 1º Premio (en construcción)
Promotor: AEDAS HOMES
Superficie: 3.000 m2 (28 viviendas)
El Campillo del Mundo Nuevo El edificio
Los centros de las ciudades están asistiendo a un proceso de creciente apreciación por parte de las nuevas generaciones, y el edificio se ubica en el centro de Madrid, en la Plaza del Campillo del Mundo Nuevo. Esta situación es especial, y habitar lugares especiales, atractivos, es exigente. Por eso, quien comprende que los inconvenientes son menores que los beneficios sienten el orgullo de vivir en esos lugares exclusivos. Y la Plaza del Campillo del Mundo Nuevo lo es.
En el extremo meridional del Madrid Antiguo, las correcciones efectuadas al trazado de las últimas murallas de la ciudad, ocurridas durante la Ilustración, permitieron la aparición de un espacio urbano que iría adquiriendo significación con el tiempo. La desaparición de la cerca abriría esa plaza hacia el sur, hacia las Rondas que circunvalarían el casco histórico madrileño, dotándola de una visibilidad espectacular.
La Plaza del Campillo del Mundo Nuevo se convertiría así en una puerta de entrada a un barrio dotado de una peculiaridad internacionalmente reconocida: el Rastro, ese extenso mercado temporal callejero que caracteriza (y condiciona) la vida de sus residentes, siendo uno de los acontecimientos ciudadanos más destacados de Madrid. La fuerte personalidad del barrio aparece, así, como uno de sus valores más sugerentes.
El edificio se proyecta pensando en el nuevo perfil de personas que está emergiendo en los últimos años. En una visión amplia, son parejas jóvenes, con pocos hijos, que quieren vivir en los centros urbanos, que aprecian el estilo de vida que los cascos históricos pueden ofrecer, aunque sin renunciar a las posibilidades y comodidades exigibles a una vivienda contemporánea.
Estos dos vectores, la particularidad de su situación y la singularidad del edificio en sí mismo, orientan el proyecto de viviendas que se presenta en la Plaza del Campillo del Mundo Nuevo.
El objetivo es proponer un estilo de vida diferente para ese nuevo perfil de personas, en uno de los puntos más excepcionales de Madrid. Porque un edificio de viviendas debe ser algo más que un conjunto de apartamentos; una comunidad de vecinos debe ser algo más que una entidad para dirimir cuestiones organizativas; y una promoción residencial debe ser algo más que una operación mercantil que ajuste una oferta y una demanda.
Se trata, en definitiva, de crear espacios para la vida de las personas, de proponer pautas para la convivencia, de concebir escenarios que albergarán la memoria y los deseos de sus habitantes, y de conjugar lo individual y lo colectivo. Por eso, este proyecto de viviendas es algo más que una distribución eficaz de apartamentos, es algo más que la solución de unos requisitos (urbanísticos, económicos, técnicos, contextuales), es algo más que unas fachadas elegantes, y es algo más que una actuación inmobiliaria, porque pretende materializar un estilo de vida diferente.
Por estas razones, la propuesta residencial es distintiva.
El proyecto de viviendas que se presenta acoge 28 viviendas complementadas por todos los servicios necesarios para su perfecto funcionamiento (aparcamientos, trasteros, cuartos de servicio, etc.).
La concepción del edificio parte del diálogo con el entorno en el que se integra (buscando la armonía entre el respeto y la integración por una parte con la identidad y la contemporaneidad por otro). La moderación compositiva de las fachadas responde a ese equilibrio.
Las consideraciones internas del diseño han llevado a privilegiar el espacio en cada vivienda. Algunos de los criterios directores para conseguirlo han sido la altura libre entre forjados, muy superior a la habitual; la distribución de cada interior (ampliando la percepción espacial gracias a la integración de, por ejemplo, cocina y salón); o la propuesta de grandes huecos en fachadas proporcionando vistas y luz a los apartamentos.
Además, la oferta de apartamentos se ve acompañada por dos propuestas encaminadas a fomentar la convivencia, aportando singularidad al edificio a través de la trascendencia de los espacios comunes.